El carpaccio es un plato típico italiano en el que se colocan unas láminas finas de carne cruda aderezadas con aceite de oliva, limón, sal y otros condimentos. La chalaquita por el contrario es de origen peruano, y se trata de una salsa con ingredientes picados que se usa como aderezo.

Este plato se crea en Dgústate de la unión de estas dos culturas y un pez típico de la región mediterránea como es la lubina, un pescado blanco de sabor suave. Este plato no solo es visualmente atractivo, si no que el sabor intenso de la chalaquita hace una conjugación con la lubina espléndida, fomentando su sabor y haciendo este plato como mínimo adictivo. Un plato para los que gusten de una delicatessen en toda regla.